Un año después, el fin de la guerra en Ucrania no parece cercano. La contienda comenzó el 24 de febrero de 2022, cuando tropas provenientes de Rusia y Belarús, cruzaron varios puntos de la frontera para invadir el país liderado por Volodimir Zelensky. Después de 12 meses en los que los ataques no cesan, Kiev resiste, mientras Vladimir Putin mantiene la ofensiva.

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La disputa entre Rusia y Ucrania es de larga data. Esta última formó parte de la Unión Soviética y se independizó en 1991. En las últimas décadas, Kiev se ha acercado a la Unión Europea y a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), pero hasta el momento no logró su ingreso a ninguno de los dos cuerpos.

Desde el inicio de la invasión, los dos organismos mostraron su respaldo a Ucrania. Pese al apoyo a Zelensky, Putin no dio marcha atrás y sostuvo la arremetida.

El 24 de febrero de 2022 marcó el fin de meses de tensiones y acumulación de fuerzas militares en la frontera, y Rusia pasó a la acción. Tres días antes de aquella fecha, Putin firmó decretos que reconocían dos regiones de Ucrania como territorios independientes, y que estaban poblados por fuerzas prorrusas: la República Popular de Donetsk y la República Popular de Luhansk.

Luego de anunciar en cadena nacional las nuevas repúblicas, manifestó que Ucrania se había convertido en un puesto militar que amenazaba a Rusia, el cual era controlado por Estados Unidos y la OTAN.

El primer día de una invasión que con el paso de los meses se convirtió en guerra, las tropas rusas invadieron Ucrania y comenzaron los bombardeos en las principales ciudades, que incluyeron a su capital, Kiev y también Járkov. Asimismo, y con ayuda de Belarús, tomaron la antigua planta de energía nuclear de Chernobyl.

Con celeridad, el presidente Zelensky ordenó una movilización miliar general para garantizar la defensa del Estado, por lo que las Fuerzas Armadas de Ucrania y otras formaciones se prepararon para el combate.

La Unión Europea y Estados Unidos no tardaron en pronunciarse, y el 25 de febrero de 2022 anunciaron nuevas sanciones contra Rusia dirigidas a los sectores energéticos, financieros y de transporte. En ese orden, también endurecieron las políticas de visas.

Tras esta iniciativa, Francia, Alemania, Canadá, Estados Unidos, Italia y Reino Unido, en motu proprio, expulsaron algunos bancos rusos del sistema Swift, la red internacional de comunicaciones financieras.

El mundo del deporte se expidió también. Antes de que acabara febrero, FIFA y la UEFA anunciaron que todos los equipos de Rusia, fuesen nacionales o clubes, quedaban automáticamente suspendidos en dichas organizaciones, hasta nuevo aviso.

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En medio de bombardeos y muertes, Ucrania recibió el estatus de candidato a la Unión Europea, una decisión que Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, calificó como “histórica”.

Un año después, las imágenes satelitales muestran un país con destrucción generalizada y pueblos completamente devastados. Mientras Ucrania resiste y trabaja en la recuperación de algunas partes de su territorio en el este y sur del país, Putin anunció que suspendió su participación en el tratado Nuevo Start, un acuerdo firmado en 2010 entre Estados Unidos y Rusia que permitía a ambos países realizar inspecciones in situ entre sí como una forma de control mutuo de armas nucleares.

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/estados-unidos/cuando-empezo-la-invasion-de-rusia-a-ucrania-nid23022023/